Los datos de carácter personal sólo se podrán recoger para su tratamiento si resultan adecuados y pertinentes, en relación con el ámbito y las finalidades –explícitas y legítimas- para las que se hayan obtenido. No podrán usarse para otros propósitos incompatibles para los que fueron recogidos inicialmente.

Éstos serán exactos y actualizados, de forma que coincidan con la situación actual del afectado. Si resultaran ser inexactos, serán cancelados y sustituidos por datos rectificados y completados.

El responsable del fichero deberá notificar al cesionario, en un plazo de diez días, la rectificación o cancelación efectuada, siempre que el cesionario sea conocido. El cesionario deberá proceder a los cambios notificados, en el plazo de diez días desde la recepción de la notificación.

Los datos de carácter personal se cancelarán cuando hayan dejado de ser necesarios para la finalidad para la cual fueron recabados. Podrán conservarse durante el tiempo en que pueda exigirse algún tipo de responsabilidad derivada de una relación u obligación jurídica,  o de la ejecución de un contrato, o de la aplicación de medidas precontractuales solicitadas por el interesado.

Serán almacenados de manera que sea accesible, salvo que sean legalmente cancelados.

Está prohibida la recogida por medios fraudulentos, desleales o ilícitos de datos.

Fuente: Agencia Española de Protección de Datos